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Pablo Alcaraz
Lunes, 9 de junio 2025, 16:16
El colegio de Valencia que realizó un viaje a Benalmádena en el que tuvo lugar una presunta agresión sexual en manada contra uno de ... los alumnos defiende su colaboración con la justicia así como que por el momento no forma parte del procedimiento judicial. Sin embargo, un auto del juzgado que investiga la causa señala la «responsabilidad civil directa» del centro.
El pasado 20 de febrero, la jueza de menores de Valencia admitió en un auto la citada responsabilidad civil directa del centro educativo en la causa, tal y como había solicitado la acusación particular tras la agresión sexual en grupo investigada y los episodios de acoso que sufrió la víctima entre los años 2022 y 2023.
Las directora general de la fundación a la que pertenece el centro, Julia Moreno, así como su homónima en el centro, María Dolores Esteban, han ofrecido una rueda de prensa en la que han lamentado los hechos, han defendido la presunción de inocencia de los supuestos implicados y han puesto en valor su colaboración con la justicia: «En todo momento hemos estado a disposición de la Fiscalía», han explicado leyendo un manifiesto antes de responder a las preguntas de los periodistas congregados en una de las salas del centro el mediodía de este lunes.
Ambas responsables han negado que el centro esté personado en la causa a preguntas de este diario. «En todo momento estamos colaborando con la justicia. Hemos presentado toda la información que nos han solicitado e incluso hemos presentado nuestros testimonios», ha asegurado Esteban. Por su parte, Moreno ha enfatizado que «ahora mismo no somos parte del procedimiento». De hecho, la directora del centro ha apostillado: «No somos parte del procedimiento».
Las responsables del colegio y la fundación reconocen que la víctima y los supuestos agresores, que todavía siguen estudiando en el centro, convivieron durante un trimestre, entre marzo y junio, tras la agresión al no tener conocimiento de la situación y que no se adoptarán las «medidas pertinentes» hasta que la resolución judicial sea «firme». Asimismo, también han indicado que los supuestos implicados tienen un seguimiento por parte del tutor, los profesores y el departamento de Orientación: «No se ha detectado ninguna incidencia ni cualquier conducta preocupante», ha declarado Esteban mientras que Moreno ha puntualizado que «siempre ha habido un control directo».
El protocolo activado tras haber tenido conocimiento de la agresión no es propio sino la aplicación del decreto 195/2022 de la Generalitat y todas las actuaciones han sido supervisadas por la Inspección educativa. Preguntados por los supuestos precedentes de acoso escolar, la directora ha comentado que todo el seguimiento se llevó a cabo por parte del tutor y si hubo algo a destacar actuaría la comisión de convivencia, «pero no tenemos nada destacable».
Sobre posibles fallos en los protocolos de vigilancia, tal y como cuenta 'Las Provincias', Moreno ha asegurado que en actividades escolares con salidas en las que se pasa la noche fuera «no existe un riesgo», pero ha reivindicado que la ratio de vigilancia de los profesores «era muy superior a la exigida por la ley».
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